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Al Marinero

  • Imagen del monumento Al Marinero
  • Imagen del monumento Al Marinero
Dedicado A: 
A Los Hombres Del Mar
Localización: 
Tarapacá, Iquique, Iquique
Dirección: 
Plazoleta Borde Costero, frente a la boya que señala el hundimiento de la Esmeralda
Referencia Localización: 
Plazoleta Borde Costero, frente a la boya que señala el hundimiento de la Esmeralda
Categoría: 
Monumentos Públicos
Tipología: 
  • Escultura
Mandante: 
La Armada
Fecha de Inauguración: 
30/08/1977

Este monumento, tradicionalmente conocido como al marinero desconocido, se encuentra frente al borde costero, a la altura de la boya que señala el lugar de hundimiento de la corbeta Esmeralda, unos tres kilómetros al norte de Iquique por la ruta A-600 a Punta Negra. Consiste en una escultura de bronce de más de tres metros de altura, y de dos y media toneladas de peso, que representa la figura de un marino con un catalejo en su mano derecha, sobre una base de concreto y piedras, pintado de blanco. Cuenta con una placa de metal que señala su inauguración el 30 de agosto de 1977, por mandato del comandante en jefe de la Armada José Toribio Merino. Conmemora a los hombres de mar en general, a los civiles de la marina mercante y a los militares. Sin embargo, su posición frente al hundimiento de la Esmeralda remite especialmente a los hechos del 21 de mayo de 1879, en el marco de la Guerra del Pacífico (1879-1883), llamada también guerra del salitre porque los intereses económicos por este mineral fueron una de las principales causas del conflicto.

Tras las primeras acciones militares de ocupación chilena en Antofagasta y Tarapacá, la Armada chilena emprende una ofensiva hacia el puerto peruano del Callao, dejando el puerto de Iquique a resguardo por dos antiguas embarcaciones. Frente a sus costas, las naves chilenas Covadonga y Esmeralda avistan la llegada de los blindados peruanos Huáscar e Independencia. La goleta Covadonga capitaneada por Carlos Condell huye hacia el sur, perseguida por la fragata Independencia, que termina encallando en Punta Gruesa, por lo que queda en manos de las fuerzas chilenas. En tanto, la Esmeralda es atacada por el fuego de los cañones y fusilería del Huáscar, para luego ser embestida en dos ocasiones por el espolón del blindado. En el primer espolonazo, el capitán Arturo Prat aborda junto a un grupo de marinos chilenos la nave más poderosa de la escuadra peruana, donde encuentra la muerte a sus 30 años. Más de un centenar de soldados chilenos perecen y la Esmeralda acaba en el fondo marino de Iquique. El combate naval de Iquique y la muerte de Arturo Prat en la cubierta del Huáscar representan el valor y el coraje de los marinos chilenos, quienes, a pesar de la evidente desventaja, defendieron con su vida las posiciones de la flota chilena.